Josh (Robert Burke) es un ex presidiario que, tras salir de la cárcel con las mejores intenciones, regresa a su hogar natal en Lindenhurst, Long Island. Allí es contratado como mecánico por Vic Hugo (Christopher Cooke), el dueño de un garaje, y se enamora de su hija Audry (Adrienne Shelly)… Película que supuso el debut de uno de los más admirados directores del cine independiente de los noventa. Rodada con poquísimo presupueto y apenas 11 días de rodaje.